Cómo ahorrar en la factura de la luz

Independiente de tu compañía de electricidad y del tipo de factura que tengas o potencia contratada, siempre podemos usar algunos truco o ideas para reducir nuestro consumo eléctrico a largo plazo:

• Es importante escoger electrodomésticos de mayor eficiencia energética (A, A+, A++), que consumen de media un 55% menos de energía. Cuando te toque renovar alguno electrodoméstico decántate por los más eficientes. Puede que sean más caros, pero a la larga salen más baratos.
• En invierno programa el encendido de la calefacción una hora antes de llegar a casa, mantener una temperatura entre 19-21 grados para que no baje demasiado y evitar subidas bruscas de temperatura para calentar el ambiente y en verano el aire acondicionado igualmente prográmalo para antes de llegar a casa y apágalo una hora antes de salir de casa.
• Apaga la televisión cuando no la estes viendo. 
• No dejes luces encendidas, intenta aprovechar la luz natural abriendo bien las persianas o postiguillos. A mí personalmente me gusta no tener cortinas muy espesas que impidan el paso de la luz, coloco sólo visillos o mantengo las cortinas a ambos lados de la ventana.
• Desconecta los electrodomésticos que no usas, no los dejes en stand by. Yo personalmente uso ladrones con interruptores de apagado para poder desconectar varios aparatos a la misma vez con más facilidad. Así tengo la tetera, la cafetera y la tostadora y cuando acabamos los desayunos desconectamos el interruptor.
• También podemos ahorrar en el uso de la lavadora y el lavavajillas, no solo ahorras electricidad si no que también agua, que es igual de importante, conéctalos cuando estén llenos. En la lavadora usa programas con temperaturas hasta 30 grados y ajusta el tiempo de lavado a la suciedad de la ropa usando lavados cortos. En el lavavajillas igualmente adecua los programas a la suciedad de la vajilla intenta reducir los programas.
• La nevera es el electrodoméstico que más consume, muchas veces olvidamos que cuando más gasta es cuando la puerta está abierta. Abre y cierra rápido para evitar un consumo elevado, no dejes la puerta abierta mientras haces otra cosa que luego necesites guardar. Los alimentos ya enfriados mantienen la temperatura baja, así que si está medio llena consume más que si está llena del todo.
• Es conveniente colocar el frigorífico retirado de la cocina, del horno o del sol para que no le dé calor. 
• Cuando usas el horno, evita abrir la puerta para que no se vaya el calor. En el tiempo en que calientas el horno también puedes usarlo para ir ya cocinando. 
• Cuando cocinas, aprovecha el calor residual, los últimos minutos de cocción puedes apagar la vitro. Pon la tapa a la olla o la cacerola, así reduces el tiempo de cocción.
• Adecua el fogón al tamaño de la cacerola, olla o sartén que estés usando, todo lo que sobre es energía que pierdes.
• La olla a presión reduce mucho el tiempo de cocción por tanto ahorras energía y tiempo. Yo la uso mucho, y para lo que siempre la utilizo para el arroz, en 5 minutos tienes el arroz preparado.
• Cuando tengo que hervir agua suelo usar una kettle eléctrica, hervidora de agua, disminuyo mucho el tiempo de calentar el agua. Nunca uses el agua caliente del grifo para cocinar ni para hacer ninguna infusión.
• Cuando usas la plancha en lugar de planchar unas pocas piezas sueltas, plancha la mayor cantidad posible de una sola vez, ya que de lo contrario multiplicas el consumo de electricidad. Comienza por la ropa que requiere menos calor, y al final la que necesita más temperatura.